Con unas cualidades físicas similares, inició su andadura en el instituto con el objetivo de llegar a ser como el gran Michael Jordan. Vuelos sin motor, giros en el aire, canastas imposibles, esa lengua siempre fuera, gestos adorables, sonrisa Profident … Jordan se convirtió casi de inmediato en una marca, y el mundo se rindió a sus pies. Pero evidentemente estos no son los únicos factores a tener en cuenta a la hora de comprar una camiseta sin mangas para baloncesto. Kobe debutó en 1996 con la camiseta de los Lakers. El retiro de camiseta es una tradición de los equipos de la NBA a sus ídolos. Además, el español sabe que aunque ha jugado en otros equipos NBA (Grizzlies, Bulls, Spurs), probablemente será la etapa en los Lakers por la que será más recordado: “Es un equipo que ganó dos campeonatos.
Un equipo único y realmente completo. En el texto se relata cómo en estos dos años que han estado al frente de la dirección deportiva de los Lakers han sembrado de dudas su capacidad a la hora de llevar el equipo. Pero pese a todo lo logrado en sus (de momento) 15 años como profesional, Kobe jamás logrará equipararse -ni siquiera acercarse- a su referente en un aspecto fundamental. LLego antes de tiempo estimado y de momento esta perfecta. Cuando un partido de local coincide en domingo, el uniforme pasa a ser blanco. Engrosaba la nómina de jugadores que con la espectacularidad en su juego por bandera y una facilidad innata para la anotación, entraban en la liga con el sambenito de ser el ‘próximo Jordan’. Él era la novedad y tomó el testigo de la espectacularidad de Julius Erving, pero multiplicando lo que ‘Dr. Otro empleado de los servicios médicos del equipo asegura que «aparecía siempre ante el público con su amor y su amplia sonrisa, camiseta kobe bryant 8 pero él no es así. Él sólo sabe infundir miedo. Es un traficante del terror».
Tras pasar parte de su infancia en Italia (gajes del oficio paterno), Kobe Bryant regresó a su Philadelphia natal coincidiendo con la explosión definitiva del Dios del Aire y sus Chicago Bulls. No ha tenido, ni muchísimo menos, tanta suerte Bryant en este aspecto. El viernes se conoció su fichaje y este domingo el jugador español Pau Gasol ya se ha dejado fotografiar (ver imágenes) en Washington, donde se ha realizado la presentación oficial con su nuevo equipo, Los Angeles Lakers. La retirada de Duncan impedirá verle jugar junto a Pau Gasol, recién fichado por los Spurs. Pau ha sido más MVP que Bryant, se pongan como se pongan.
Luego vino una retrospectiva de Bryant, en sus palabras, en el marcador mientras el violonchelista Ben Hong tocaba «Aleluya». Para acompañar a sus emotivas palabras, la estadounidense publica unas imágenes del homenaje que le han hecho en el colegio, el Harbor Day School de Newport Beach, en California. Cuando comenzaba a tomarse el baloncesto en serio, y atrapado por los encantos del líder de aquel equipo, Kobe creyó que la mejor fórmula para triunfar era imitando al mejor. «Kobe Bryant sigue siendo un jugador que puede representar a Estados Unidos en Río», recordó Jerry Colangelo, presidente de la Federación de Baloncesto de los Estados Unidos, en declaraciones recogidas por la web del canal de televisión ESPN. Ninguno de los que cargó con esa etiqueta pudo acercarse lo más mínimo al considerado por gran parte de la opinión pública como el mejor jugador de baloncesto de la historia, pero Kobe era otra cosa.